Si bien, a medida que el "progreso" fue ganado terreno el hombre fue cortando su contacto con la naturaleza. Hace varios años ya que por distintas vías nos llega información acerca de la importancia de retomar nuestro contacto con la naturaleza, nuestra madre, nuestra escencia...
Al tomar contacto con la naturaleza se carga nuestro campo aural y reestablece su equilibrio. En los escenarios naturales inalterados, hallamos nuestra sincronía natural con las energías del planeta. Lo que comamos en un entorno como este será mucho más nutritivo para nosotros, ya que no solo las propiedades alimentarias que estemos consumiendo serán de mejor calidad, la energía que éstos alimentos nos aporten serán de óptima calidad.
Es de vital importancia pasar algunas horas a la semana en un escenario natural, para reestablecer el equilibrio de nuestro campo y las energías de la tierra. Lo cual, contribuirá sobremanera en una salud óptima.
Por ejemplo: los lagos tranquilos ejercer un poderoso efecto sedante, relajando nuestras tensiones. Los ríos de aguas rápidas mejoran nuestro campo al hacerlo vibrar más rápido de un modo saludable.
Dicen los expertos que los árboles de un pinar vibran a una frecuencia muy parecida a la del campo humano, por eso el hecho de permanecer en un lugar como este , o tomar contacto con un pino recargará nuestro campo cuando lo necesitemos.
Las montañas nos ponen en contacto con el reino mineral y nos ayudan a arraigarnos a esa fuerza para poder impulsarnos a las máxima altura de nuestra conciencia y el aire limpio de un desierto nos ayudará a extender nuestro campo a largas distancias, a sentirnos más grandes, incluso, más capaces...
El poder sincronizarnos con la energía de la naturaleza nos permite el acceso a la sabiduría suprema y nos permite confiar en nuestra naturaleza humana primordial.
La energía de la Madre Naturaleza nos permite activar en nosotros una mayor comprensión de la vida, cada especie está dotada de gran sabiduría. Podemos aprender mucho de la naturaleza, de los animales...
No todos tenemos "a mano" algún lugar natural, menos inalterado por la mano del hombre. Pero, al menos nuestros jardines, huertos, parques, nos ayudan a contactarnos con la Tierra, compensando así , de alguna manera el legado natural perdido. Las plantas nutren nuestro campo enegético de diversos tipos de frecuencias energéticas .Por ejemplo: las plantas de interior mantienen la energía de una casa cargada, limpia y saludable y cuanto más contacto tengamos con esas plantas mayor será el intercambio de energía nutriendonos a nosotros y a la planta.
Los huertos ecológicos o biológicos no solo nos ayudan a conectarnos con las energías de la Tierra, sino qeu además los alimentos que nos proveen están en total equilibrio energético de acuerdo a nuestras necesidades.
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