"
No somos responsables de las emociones, pero sí de lo que hacemos con las emociones"
(Jorge Bucay)
Sucede que, a menudo o por etapas en nuestra vida, estamos reactivos, somos como una especie de baldosa floja que salpica al menor contacto con el pie de otro. Nos embargan la tristeza, creemos que no lo podemos lograr, no podemos evitar reaccionar ante la supuesta provocación de otro, etc.
Lo cierto es que, no podemos evitar nuestras emociones, son parte de nuestra naturaleza desde que fuimos un hombre primitivo. Las mismas nos permitieron aprender y memorizar formas de seguir viviendo: aprendimos que el fuego quema, que un rostro colorado y con el ceño fruncido era el rostro de alguien muy encolerizado, a prepararnos ante la aparición del tigre dientes de sable, etc desde lo más primitivo de nuestra condición humana hasta nuestros días. Es verdad, no podemos evitarlas. Pero podemos aprender a gestionar nuestras emociones para tener una vida mucho más plena.
Hace mas o menos 30 años atrás, se creía que el CI (Coeficiente Intelectual) lo era todo, era el que determinaba una vida de éxito o no. Pues, diversos estudios de las más destacadas Universidades de EE.UU en serios y vastos seguimientos de grupos de alumnos,por ejemplo,desde su más tierna infancia en el jardín de Infantes hasta ser graduados de la Universidad pudieron comprobar que un alto CI no era un factor determinante de una vida de éxito. Aquí la parte de la historia de hace 20 años atrás más o menos donde dos psicólogos de la Universidad de Yale Peter Salovey y Jhon Mayer acuñaron el término Inteligencia Emocional, el cual estoy segura que has oído mucho sobre todo es éstos últimos años.
La clave de una vida de éxito está basamentada en la: INTELIGENCIA EMOCIONAL
Qué es la Inteligencia Emocional?
La Inteligencia Emocional, difundida mundialmente por el psicólogo, filósofo y periodista Daniel Goleman, es la capacidad de:
* Sentir
* Entender
* Controlar y
* Modificar estados de ánimo propios y ajenos
La misma nos plantea una nueva manera de ver y enfrentar el mundo o altibajos de la vida mostrandonos que existe algo más que la mera Huida/Ataque del hombre primitivo. Desarrollando capacidades como el autoconocimiento, autocontrol, motivación, entre otras, mejorando y optimizando nuestra relación con uno mismo y a partir de allí con todo nuestro mundo: nuestras relaciones laborales, familiares, de amistades, etc.
Controlar o Reprimir?
Vale aclarar, que bajo ningún punto de vista es saludable reprimir las emociones. Cuando hablamos de
controlar , lo hacemos en términos de adecuar la expresión de la emoción al contexto. No obstante, en casos extremos donde sea imperioso hacerlo puede ser necesario reprimir la exteriorización de la emoción con total conciencia de la misma, sin autoengaños y luego, obviamente tendré que hacer algo con esa emoción en el momento adecuado.
Nuestro Cerebro y las Emociones:
El comprender como se ha ido desarrollando el cerebro aclara mucho el tema.
En la era de los reptiles, solo había un
tallo encefálico : pegadito pegadito a la columna vertebral. EL olfato jugaba un papel primordial y su única función era asegurar la supervivencia. Él mismo simplemente distinguía entre: alimento/veneno- sexualmente disponible/enemigo - predador/presa. No había pensamiento, no había aprendizaje, una madre podía comer a su propia cría con tal de subsistir.
Luego en el devenir del desarrollo del cerebro aparece el
Sistema Límbico. Un sistema capaz de gestionar las respuestas fisiológicas a las emociones y que está asociado a la conducta. Compuesto por centros como: tálamo, hipotálamo, hipocampo y amigdala cerebral. Éstos importantes centros funcionan en los mamíferos y en el hombre primitivo promoviendo básicamente la respuesta: huida/ataque.
En el hombre, aún hoy debajo del neocortex, conforman los que podríamos denominar Los Centros de la Afectividad, donde se provocan distintas emociones experimentando así: pena, angustia, alegrías. Siendo la Amigdala cerebral el centro de proceso de las emociones. Éste sistema es el que posibilita la memoria y el aprendizaje.
Finalmente con el desarrollo del
Neocortex , ubicado de manera que recubre todo el Sistema Límbico, directamente debajo de la corteza cerebral, aparece el Yo Conciente. El mismo planifica, comprende lo que siente, coordina los movimientos. Es el asiento del pensamiento y centros que integran y procesan datos registrados por los sentidos. Es por ello que podemos por ejemplo conmovernos ante una obra de arte.
El
Neocortex trabajando junto al
Sistema Líbico, explica que podamos tener control sobre nuestras emociones.
>>
Cuando sentis que el enojo te está por "secuestrar" y se está apoderando de vos un tip sería: racionaliza, contate que sentis y comprobate que podes estar equivocado (es por ello que la famosa catarsis es una mentira, solo es retroaliemntación)
>>
Otra opción: respirá profundo, hace una pausa elegí la emoción con la que vas a responder a "eso" - salí a caminar al aire libre
>>
Los 90 segundos:
Una emoción vive solo 90 segundos (nosotros la hacemos persistir, crecer, transformarse), ese es el tiempo que vive si no la alimentamos. Espera 90 segundos, respirá no reacciones antes de ese minuto y medio.
Una Persona con Inteligencia Emocional:
- Tiene una Actitud Mental Positiva
- Reconoce los propios sentimientos y emociones
- Es capaz de gestionar/regular sentimientos y emociones
- Es empática (sintonizar con el otro, ponerme en su piel, darme cuenta como se siente, que necesita para cooperar con el otro.
- Es capaz de tomar decisiones adecuadas
- Tiene motivación , interés, ilusión
- Autoestima
- Sabe dar y recibir
- Posee valores alternativos o flexibles
- Capaz de superar dificultades y frustraciones rápido
- Capaz de integrar polaridades (conciliar, mediar, etc)
Mi vida es la bendición que yo creo,
Marisela
